Si tu vocación es trabajar con la población infantil, te felicito. Es una de las áreas más exigentes de la psicología y , a la vez, de las más satisfactorias. Los psicólogos infantiles necesitan un plus de habilidades para poder intervenir con los niños, con sus familias y entorno. Hoy te quiero dar 6 consejos que, para empezar, te van a ayudar, facilitar y dar luz en tu trabajo con la infancia.
1) Repasa y Aprende Psicología Evolutiva.
Parte del trabajo que vas a desarrollar siendo psicóloga infantil y juvenil ( sobre adolescencia te hablaré otro día) es hacer psicoeducación con padres y madres con el objetivo de que comprendan que muchos de los comportamientos y respuestas emocionales de los niños y niñas que vas a tratar pertenecen al estadio de desarrollo en el que estos se encuentran.
En otras ocasiones tendrás que ayudar a que reconozcan, comprendan y se sensibilicen con dificultades en el desarrollo evolutivo de sus hijos.
Siempre vas a tener que contemplar la etapa del desarrollo para realizar una buena evaluación y, posteriormente, un plan de intervención terapéutico adaptado al momento cognitivo, social y emocional del niño.
Tener una comprensión del desarrollo infantil y sus implicaciones para la terapia es esencial.
2) Aprende a mirar desde diferentes puntos de vista
Con esto me refiero a que tienes que poder ver al niño desde la perspectiva de la familia, a la familia desde la perspectiva del niño (cómo él los percibe), y desde tu mirada profesional. Una mirada amplia, para poder situarte en todos los puntos de vista hará tu trabajo mucho más sencillo y la posibilidad de establecer una adecuada alianza terapéutica.
3) Prepárate para ser creativa y con motivación auténtica para jugar.
Los niños aprenden haciendo, explorando, y experimentando. Si quieres ser psicóloga infantil vas a necesitar ser creativa y flexible. Vas a ver niños y niñas de diferentes edades, y con gustos diferentes. Confía en el niño y en el plan de tratamiento que has elaborado. Esto se consigue usando juegos, arte, metáforas y actividades creativas que permitan a los niños participar en la terapia. El espacio terapéutico ha de ser un espacio pensado para los niños, donde se sientan seguros y puedan expresarse.
Las psicólogas infantiles deben estar al día en cuanto a juegos, juguetes y lo que a la infancia le gusta. Es un plus para tu trabajo. La predisposición para jugar es muy importante, los niños deben sentirnos predispuestas a jugar igual que si trabajamos con adultos, estos deben percibirnos predispuestas a escuchar.
“Los juguetes son las palabras del niño y el juego su lenguaje”.
Garry Landreth
4) Trabajas para los niños así que involucra a la familia ( y a las escuelas también)
Los niños están integrados en un sistema familiar y también en un sistema escolar, y trabajar eficazmente con los niños significa trabajar efectivamente con estos sistemas.
En general, los niños acuden a terapia con sus padres y, como terapeutas infantiles, debemos establecer una buena relación con ellos, nuestro objetivo es que quieran volver. Mi formación de base es la terapia familiar y esto me ha dado recursos y la claridad para trabajar con los sistemas a los que el niño pertenece. A veces tendrás que ver a unos abuelos, o a una cuidadora o a la profesora y debes estar abierta a ello. Si la niña o niño está en el sistema de protección de menores, involucra a un educador (si es posible) o al adulto responsable.
Si te sientes preparada, realizar sesiones conjuntas de juego puede ser un gran paso en los avances terapéuticos.
5) No tengas prisa por obtener resultados.
Cada niño tiene su ritmo y los procesos llevan su tiempo. Esto hay que saber transmitirlo a las familias. Vas a tener que aprender a valorar los pequeños avances y buscarlos con las familias y con el niño. Muchas veces no vas a ver cambios tan rápido como te gustaría o esperas, o verás una recaída. Es importante aceptar esto como parte de los procesos terapéuticos. Tu actitud ha de ser auténticamente optimista para poder contagiar a la familia.
6) Haz trabajo personal en el que puedas “revisar” tu infancia.
¿Te queda algo pendiente en tu niñez que necesitas revisar y resolver? Hazlo. Es una de las maneras de poder estar regulada y presente durante las sesiones. El trabajo personal terapéutico implica tener cuidado de nosotras mismas para poder ayudar a los demás.
¿ Que te parecen los consejos? Si estás empezando tu trayectoria cómo psicóloga infantil , ¿crees que son de ayuda?
Si ya tienes experiencia como psicóloga infantil, ¿qué consejo añadirías?
Déjame en comentarios tu experiencia y
Gracias por leerme
NOTA: En todos mis escritos cuando escribo niño, espero que se entienda estoy incluyendo niños y niñas.
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